Cuarta Carta del Ministro

Prot. N. 00260/20

Roma, 24 de abril de 2020

A todos los Superiores Mayores
A todos los Hermanos
En sus sedes

Queridos hermanos,

!El Señor les de la paz!

Espero que todos hayan podido vivir con profundidad los grandes momentos de la Pascua, que para la mayoría de nosotros han transcurrido cerrados en sus respectivos conventos y en sus propias capillas. Una ocasión formidable y singular para reflexionar más sobre el misterio de la pasión y la muerte, al que se sometió el Hijo de Dios, y para renovar el corazón en el misterio de la resurrección y de la vida, una verdadera esperanza segura que sostiene realmente nuestro incierto caminar.

¿Cuál es la situación ahora? De la información que podemos obtener, especialmente por la dedicación encomiable y necesaria de los consejeros generales, me parece que puedo actualizarles con estas pocas palabras. En casi todos los países donde estamos presentes, se han tomado medidas para contener la pandemia, con grandes restricciones y sobre todo con la obligación de quedarse en casa. Nosotros también, en general, nos hemos obligado y, en cuanto yo pueda saber, también estamos comprometidos en respetar las disposiciones. Recomiendo encarecidamente a todos que cumplan cuidadosa y prudentemente con toda responsabilidad: ¡es un deber para uno mismo y para con los demás!

Hasta ahora, relativamente pocos capuchinos se han infectado con el virus: un buen número de hermanos de la provincia veneciana, algunas fraternidades de la provincia de Francia, algunos otros hermanos de las provincias del norte de Italia y Europa. Esta es el área del mundo donde el virus hasta ahora nos ha afectado más y ha contribuido a la muerte de algunos de nosotros; Contamos hasta el momento de diez a quince hermanos fallecidos, la mayoría de ellos todavía en la provincia de Venecia y en la Provincia de Francia. Oramos al Señor para que otros no se infecten y para que continúe la recuperación de otros hermanos.

Se nos informa que el virus también ha entrado en algunas fraternidades en América del Norte; precisamente esta mañana recibí la noticia que ha fallecido, a causa del COVID -19, uno de nuestros hermanos de la Provincia de Nueva York. Lo encomendamos al Señor de la vida, tal como lo hemos hecho repetidamente con los demás hermanos.

Desafortunadamente, debemos señalar que quienes más sufren siguen siendo las personas más pobres, que de repente se encuentran sin nada y sin la posibilidad de obtener incluso lo esencial para vivir; Pienso en particular en las grandes poblaciones de Asia, pero no solo. Por eso quiero agradecer a todos los hermanos que ya están tomando medidas para ayudar en las diversas maneras posibles los pobres; eres realmente una hermosa expresión de nuestra Orden. No duden en hacernos saber las necesidades, y la Orden, en la medida de lo posible, no dejará de ayudar.

Mientras esperamos a que todo el mundo sepa cómo evolucionan las cosas en el mundo, pero sabemos que la actividad no se reanudará en el corto plazo. Esto nos obliga, por razones razonables y prudentes, a decidir posponer todos los principales compromisos previstos para junio. Por lo tanto, se suspenden los Capítulos programados para el mes de junio, así como el encuentro en Roma para los nuevos Ministros. Para otras reuniones 'locales', cada circunscripción debe moverse con la prudencia necesaria, de acuerdo con la evolución de la situación, y prestando la máxima atención a las indicaciones de las autoridades políticas y sanitarias.

Eso es todo por ahora. Solo me queda saludarles, unidos en oración, les deseo un fuerte soplo del Espíritu y bendecirles a todos.

Roberto Genuin        
Ministro general OFM Cap.

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